El Pais,
15 Otsaila 2008
"Estoy en el infierno, no merezco menos"
Un perro, Birillo, ladra alegre tras la verja. Iván Basso (Cassano Magnano, Italia, 1977) abre la puerta de su casa, un piso, sótano y buhardilla, pequeño jardín y cancela, perdida entre el magma de edificaciones y el laberinto de carreteras de Varese, junto al aeropuerto de Malpensa.